domingo, 5 de julio de 2009

SAVIDAN, UN CUENTO SIN FINAL FELIZ


Tarde le ha llegado a Savidan el sabor del éxito al máximo nivel, y muy poquito ha podido disfrutarlo. Steve Savidan, nacido en Angers, Francia, siempre fue un futbolista habitual, discreto, en las divisiones inferiores del futbol galo.

No fue hasta hace 4 años, cuando las cosas empezaron a ir realmente bien para Savidan, formando parte del Angouleme, conseguía, ascender a la Ligue 2, y un año más tarde, a la máxima división de la competición francesa. Savidan, era protagonista de esta mítica gesta, siendo el estilete y goleador de aquel equipo que causaba sensación.

La carrera del delantero siempre fue discurriendo en un segundo plano. Tras debutar en el Angers, el equipo de su ciudad natal, pasó sin destacar en demasía por Chateauroux, Ajaccio, de nuevo al Angers, para más tarde jugar en el Beauvais, y recalar finalmente en el Angouleme, equipo donde haría historia, llegando a la cima, tras comenzar desde lo más bajo de las divisiones nacionales.

Su fichaje sonado, y por fin mediático le llegaba la pasada temporada, al ser contratado por el Caen. La cantidad de 5 millones de Euros fue pagada por el llamado goleador del pueblo. Un futbolista que nunca había pensado en ganarse la vida con el balón, y que el destino le tenía reservada una agridulce sorpresa, o como dicen, una buena noticia, y una mala… bueno, más bien malísima.

Así, su mejor momento llegaba realizando una excelente temporada y recibiendo despues, la llamada del seleccionador nacional. Savidan escribió su nombre como debutante con la camiseta de la seleccion francesa, llegando a la cumbre de sus aspiraciones. Todo iba bien hasta la mala noticia...

Todo lo que parecía un cuento de hadas, una carrera digna de elogiar, de un futbolista llegando desde lo más humilde, se transformó en pocas horas. El Mónaco, equipo que estaba a punto de fichar a Savidan, le detectó un problema en el corazón, que ha provocado que el jugador se retire de inmediato.

Se podría decir que la carrera profesional de Steve Savidan estaba comenzando ahora, a sus 31 años, cuando le ha llegado la oportunidad de jugar en uno de los más grandes clubes franceses. No ha podido ser, y Savidán, ya un mito del futbol semi profesional, colgaba las botas anticipadamente para no poner en riesgo su vida.

Una historia corta, intensa, pero con un final triste e inesperado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario